El 5 de junio, el exchange de criptomoneda Coinbase fue objeto de críticas por sus supuestos esfuerzos por vender servicios de vigilancia cripto tanto a la Administración de Control de Drogas de los Estados Unidos como al Servicio de Rentas Internas.
En los días posteriores, los representantes de Coinbase han dejado claro que los servicios analíticos de la empresa no comparten ningún dato personal identificable con las fuerzas del orden. Afirman que obtienen todos los datos de la información disponible públicamente.
Un sitio web elabora una lista de exchanges libres de la normativa "Conoce a Tu Cliente" (KYC) a la vez que señala algunas advertencias
El Gran Hermano ha estado vigilando durante casi una década
Aunque la negación de Coinbase puede contener algo de verdad, una fuente que ha trabajado con las normativas para los exchanges de criptos y las empresas de cajeros automáticos para Bitcoin reveló a Cointelegraph que múltiples entidades gubernamentales han estado supervisando activamente a los usuarios en casi todos los exchanges centralizados y proveedores de servicios de custodia de criptos durante años.
Hablando bajo la condición de anonimato, esta fuente indicó que las tácticas de vigilancia hacia las criptos se remontan a los primeros días de Bitcoin. Dijeron que estas prácticas se convirtieron en un esfuerzo mucho más amplio después del muy famoso incidente de Mt. Gox, en el que 850,000 BTC desaparecieron a finales de 2013 en el que para ese entonces fuera un popular exchange de criptomonedas.